lunes, 7 de junio de 2010

Un parto especial


Son las 23:00 y acabado de llegar a casa del hospital, estoy agotada pero quería contaros el parto que he presenciado hoy y si lo dejo pasar unos días probablemente vaya perdiendo detalles.
Llegue al hospital a las 15:00 y la matrona me comenta que está una chica de parto, aún poco dilatada y que no se va a poner epidural por decisión propia.
Pasamos a la habitación y la matrona me presentan a la parturienta, quiere que me quede con ella durante todo el proceso y que evalué y detecte las contracciones que tiene través del tacto de la barriga, así que antes de marchar le da la vuelta al monitor para que yo no lo pueda ver y no me guié por él.
Patricia ( la parturienta) se encuentra sentada en una pelota como las de pilates, cojo una silla y me siento al lado de ella y comenzamos a charlar. Llega una contracción, le pongo la mano en la barriga , cuesta detectarla porque a estas alturas el abdomen se encuentra duro, aún así consigo notarla. Se queja de dolor lumbar, con cada contracción a la vez que le toco el abdomen aprovecho para ponerle la otra mano en la zona lumbar y darle un masaje, eso le relaja y le ayuda a seguir.
Cómo excepción a lo que me llevo encontrando estos días esta chica quiere un parto natural ( algo que realmente sorprende) y se le respeta. No rompemos bolsa inmediatamente, la monitorización solamente la hacemos de forma externa, al no tener epidural Patricia puede estar en la postura que quiera.
Cada vez las connotaciones eran más intensas y rítmicas, pero llegado un momento la dinámica uterina se frenó levemente.
Lo curioso fue lo siguiente, su marido estaba camino del hospital, se encontraba trabajando fuera de la ciudad cuando ella se puso de parto. La matrona me dice:
- Esto se ha parado porque su marido no ha llegado y la mente de Patricia ha bloqueado el proceso, en cuanto llegue él entonces dará a luz.
Resulta que así fue. Él llego y la dinámica siguió su curso.
Decidimos romperle la bolsa porque llegado un momento el efecto del peso de la cabecita es más efectivo que el de la bolsa para dilatar.
Patricia se acuesta , la intensidad de las contracciones aumenta y sus quejidos también, el dolor está llegando a ser difícil de soportar, quiere empujar , la matrona le dice que hay que esperar, yo sigo a su lado, por su mirada creo que le transmite seguridad el tenerme allí, llevamos juntas unas horas y confía en mi.
Finalmete no puede más y con la siguiente contracción empuja, se ve la cabecita, casi da a luz en la cama, un poquito más y no le da tiempo a entrar en el paritorio. Una vez en en la mesa de partos el dolor le hace gritar ( buff la intensidad debe ser enorme, creo que estoy cogiendo miedo a parir) , me quedo cerca de ella y le cojo su mano, su marido está ahí pero me busca a mi, dos empujones más y Enma está fuera, se la ponemos encima y ahí se queda tranquilita, la tapamos , le ponemos un gorrito y se la dejamos mientras la matrona cose un pequeño desgarro.
Una vez terminado todo comenzamos a evaluar el posparto, la mamá y el bebe se quedan con nosotros dos horas más.
Realmente sorprendente la recuperación de la mujer al no tener epidural, útero contraído y dos dedos por debajo del ombligo a los 20 minutos, sangrado escaso, y una mujer que ha podido ponerse de pie para volver a su cama nada más dar a luz.
Le llevamos a la nena y está comienza a mamar.
De verdad, esta chica me ha dejado sin palabras, ha sido valiente y todo un ejemplo, y por supuesto se lo he dicho. Me da las gracias y lo hace de una manera emotiva, se percibe que está muy agradecida.
Se marcha a la planta con su niña. A la media hora suena el timbre de partos, nos traen unos bombones.

La tarde continua con un parto de riesgo, una preeclampsia , hay que hacer una inducción..
En el próximo post os contaré.

Antes de marchar del hospital , me acerco a la planta de maternidad para ver como esta la mamá, se encuentra genial, con Enma colgada del pecho , no ha dejado de mamar en toda la tarde. Mañana les haré otra visita antes de que les den el alta.

¡Espero que os haya gustado! Hoy me he ido muy satisfecha del hospital, me ha encantado este parto y haber podido ayudar a la mamá, aunque sólo fuera con mi compañía.

Un abrazo

domingo, 6 de junio de 2010

El comienzo


¡Hola a todos!
Siento haber estado desparecida en combate, pero el cansancio extremo que llevo arrastrando durante estos 10 días me ha impedido escribir!
Tengo tantas cosas que contar que seguro que un montón se quedan en el tintero, intentaré empezar desde el principio.
Día 18.
Los nervios y la curiosidad se apoderan de mi. Cae la noche.. David llega del trabajo y me sorprende con una caja de pasteles para celebrar mi comienzo. Un detalle enorme, ese tipo de sorpresas no suelen ser habituales en él, son más propias de mi, ¡así que doble valor y emoción!
Nos vamos para la cama, pongo tres despertadores ( en ocasiones pienso que se me contagiaron ciertas manías de mis antiguos pacientes de salud mental) y a dormir, o por lo menos a intentarlo..
Día 19.
Nos citamos en la puerta de partos con la coordinadora, cuando llego me encuentro con una chica, mi futura compañera, comenzamos a hablar y me siento a gusto, da la sensación de que somos compañeras desde siempre, encajamos bien.
Llega la tercera, una chica que se ha venido de fuera, también muy agradable, decidimos entrar.
Primera sensación de nervios, me gusta el sitio, me transmite algo positivo, al lado de los paritorios y salas de dilatación descasan pequeñas cunitas que me transmite ternura.
Qué raro se me hace estar en un hospital y sin embargo que el ambiente que se perciba sea de alegría y de recepción de nuevas vidas, en el resto de los servicios es lo opuesto, tristeza y despedidas.. ¡Siempre supe que esta era mi profesión!
Conocemos a la coordinadora y a dos matronas, nos reciben muy bien, se nota que quieren enseñarnos , les gusta que estemos ahí.
Nuestro nuevo nombre durante estos dos años en el hospital va a ser "peque", cuando se refieren a nosotras nos llaman así ( jajaja con 28 rondando los 29 ese apodo se agradece, me gusta sentirme aún un poco niña, y espero no perder nunca ese sentimiento).
Una vez terminadas las presentaciones bajamos a personal a firmar el contrato, nos despedimos y quedamos para el día siguiente, presentación oficial de todos los residentes.
Día 20.
Acto de presentación y despedida, estamos emocionadas, 24 residentes terminan esta dura y bonita etapa y entre ellas , las tres R2 de matronas , fotos de todos ellos y música de fondo, un regalo para cada uno, lloros... son muchas horas y muchos momentos los que han vivido juntos. Pasamos a la presentación, nos nombran uno por uno y nos dan la bienvenida, cuando termina el acto unos pinchos y unos vinos.. Mañana comenzamos.
Día 21-28.
Seminarios, y más seminarios, algunas materias se me escapan de las manos, la estática fetal nos cuesta entenderla y sobre todo imaginarla, dicen que es normal, apuntes y más apuntes..
Todo lo que dan me gusta, bufff siempre quise estudiar esto...
¡He tardado tanto en conseguirlo! Lo que me ha costado... ¡¡Pero ya estoy aquí !!
En ocasiones aburro a preguntas a los docentes, mi afán de saber me supera, dicen que vayamos con calma, que es mucho lo que tenemos que aprender y que debemos ir sin prisa, poquito a poquito.. a día de hoy ya estoy más tranquila.
Día 30.
Primera guardia - 12 horas en partos- Después de 8 años vuelvo a pisar un hospital, pero en esta ocasión es totalmente diferente, entro en el hospital a formarme en lo que quiero, los nervios apenas me dejaron dormir.
Entro en partos, un matrón y una matrona me están esperando, me reciben de una manera agradable, durante muchos meses me voy a convertir en su sombra.
Nos llaman de planta, inducción selectiva de una mujer de 44 años, y aparece mi primera pregunta:
- ¿ Por qué se quiere inducir el parto si aún no ha salido de cuentas?
Se miran entre ellos y se ríen...
- Acabas de aterrizar en el mundo real, en este hospital a pocas mujeres vas a encontrar que quieran parir de forma natural.
Primera sorpresa.
La mujer en cuestión tardo unas 7 horas en dar a luz (rápido para ser una inducción), durante el proceso de seguimiento con el matrón hice mi primer tacto, por supuesto no note nada, maniobras de Leopold, monitores, pelota de pilates y finalmente llego la epidural.
Aún sigo fascinada de la sensación que me produjo el ver al bebe, durante las 7 horas que la mujer estuvo de parto y la estuvimos controlando, cuando le tocaba la barriga para notar las contracciones, o cuando le colocaba el monitor y palpaba el dorso del bebe, o cuando le hacíamos un tacto y tocaba la cabecita; no me imaginaba que un bebe tan formado y bonito unas horas más tarde iba a estar en mis manos, es algo mágico, ¡no se describirlo!
El parto fue hermoso, la matrona y la mamá eran una equipo y la niña que nació preciosa, empecé a notar mis ojos humedecidos, gracias a la mascarilla y gorro pude disimular y conseguí contenerme, no quiero pensar en el primer parto que atienda, me da miedo emocionarme y ponerme a llorar.
La guardia continuó con alguna urgencia y sus correspondientes monitores y poco a poco fui conociendo la unidad..
Día 31-5.
Me tocó una semana tranquila, a día de hoy he podido ver tres partos y 4 procesos de dilatación, me voy dando cuenta de una cosa, en función de la matrona que atiende a la mujer el parto es de una manera u otra, cada profesional influye sobre el proceso ( fisiológico o intervencionista).
He de confesar que me siento un poco decepcionada por como se trata el parto en general en este hospital, hay practicas que se hacen por rutina que no me gustan ni las comparto, pero ya estaba avisada de que era un hospital en general muy intervencionista y que el parto natural aquí no se llevaba a cabo, aún así me duele verlo.
Por sistema se rompe bolsa, ¿ me podéis decir por qué hacen esto?
¡La bolsa por su propio peso y la presión osmótica que produce aumenta la dilatación del cuello uterino! Así es que una vez que se rompe la bolsa antes de tiempo, la dilatación se frena y entonces hay que recurrir a la oxitocina y al parto medicalizado.
Bufff esto me supera, cuando los procedimientos no tienen una lógica me ponen furiosa, aún así estos dos años ver , oír y callar, cuando sea matrona ya escogeré el lugar donde quiera trabajar.
Para terminar, resumen de mis progresos:
- Hice 4 tactos, ( en el último creo que note cuello)
- Rompí una bolsa integra ( que miedo me dio)
- Puse un electrodo interno al feto para monitorizar FCF ( pero lo hice mal y en lugar de clavarlo en la cabecita se lo deje clavado en el cuello uterino a la mamá)
- Corté y pincé un cordón
- Me hice experta en maniobras de Leopold y monitores externos ;)
Como podéis ver una semana intensa y agotadora, mañana empieza la siguiente, ¡os tendré informados!
¡Espero que os haya gustado!
Un abrazo